
Exalta la vida de José Antonio Primo de Rivera como un ejemplo de entrega a la causa nacional. La obra resalta su dedicación incansable a la justicia social y la unidad de España, mostrando cómo su liderazgo y martirio lo convirtieron en símbolo eterno. A través de su legado, se refleja el espíritu de lucha y camaradería que inspira a generaciones a seguir su senda revolucionaria.